Debió de ser en lo que
actualmente es quinto de primaria con diez u once años, aunque tuviese uno menos,
que por aquel entonces iba un servidor un año adelantado. El momento de gloria
de escalada de puestos a la cabeza de la clasificación general obedeció a la
enumeración sin ningún error posible de todas las provincias de Andalucía.
Fue un momento clave en mi
adoctrinamiento que me reveló el placer de la recompensa ante el trabajo bien
hecho. Prosperé ¡y como! sin duda en un gran día pletórico de fuerza y
preparación.
Recogí mis cosas del pupitre en
mitad de la tabla y me apoderé del mallot de la regularidad avanzando y situándome
cerca de la autoridad vigilante de nuestras conductas, por aquella época, una entrañable maestra que no recuerdo su nombre.
Algo parecido a la recompensa de
saborear pececillos en boca de los delfines en el acuario atravesando los aros
en sincronía perfecta de saltos por el trabajo bien hecho.
Ahora las recompensas individuales (por el trabajo bien hecho) de boquerones en vinagre y patatas fritas se riegan en las terrazas de los bares al aire libre que nos dan la libertad. Eso sí, tras horas de infatigable auto gobernación, en definitiva, de autorregulaciones autorrealizadas, de al parecer mayorías auto responsables.
La mirada de colocación (que no por niveles etílicos inaceptables o drogas perniciosas) obedece a frases hechas del tipo “mira mengano o fulano, lo bien que está o se ha colocado” y nos sitúa a cada uno desde la sinarquía en nuestros sitios precisos con derecho a cervezas después del curro y descanso por unos días en fin de semana y períodos vacacionales.
Que será por algo te lo hayas ganado en el
ciclo repetido, en el tiempo, de tus ocupaciones cada día y hora del año.
Como me encuadro (si también con
esta clave) en la semana de la arginina de nuestro sistema endocrino (la puerta 21) analizo la poderosa sombra controladora que he debido, y supongo aun
abrazo, no se crean, que como el resto de ustedes no se escapan, la tengan o no.
En la "Secuencia de la Perla”¹ para alcanzar la prosperidad, en mi caso, preciso de minar o debilitar esta poderosa sombra. Y la desbloqueo con el don de la autoridad. La única transformación en los teatrillos de la vida que merece arrinconar los miedos a través de la nobleza y el amor.
“…Como dice E. M. Forster, se
es aristócrata (sin, entiende él, connotación clasista o de poder) de lo
sensible, aristócrata de lo considerado, cómplice de la verdadera tradición
humana, que es la del humano que es o trata de mostrarse tan sensible hacia los
demás como a lo es de sí mismo”
expresado en quizás. el 5 de diciembre
de 2011
Mi coraje (ese justo equilibrio
entre la cobardía y la temeridad) no precisa de controles, dinero y poder de
los que los ansían en su periplo existencial, interpretando mal los papeles que
se otorgan por miedo y no saber responder, aunque se sepan adecuadamente, las
provincias de memoria.
Si, no lo olvidemos, el control, el dinero y el poder afianzados persiguen a esta sociedad.
Si Foucault
levantara la cabeza desde otros planos nos diría algo así como que ya os lo
decía yo: “El sujeto constituido” y pulido en estos tiempos por las tecnologías, navega, y nunca
mejor dicho, por los datos que modelen nuestros gustos y pareceres que no
socaven el programa homogéneo global diseñado, para que otros (los que de
verdad gobiernan), sigan amasándonos, o será amansándonos, dándonos la matraca (que por algo es Viernes Santo), y sintiendo el falso placer
del control que creen alcanzar desde el poder que consigan.
Y así, completamente alelados, es una posibilidad, mal vamos.
Interprete: Rubén González
1. "Tu Secuencia de la Perla está hecha sobre cuatro Claves Genéticas específicas que tienen una relevancia directa sobre tu capacidad de ser eficaz y próspero en la vida. Cada una de estas Claves Genéticas te muestra un patrón de la Sombra que te impide vivir una vida próspera y liberadora"
Richard Rudd. Las Claves Genéticas. Glosario de fortalecimiento personal
Semana del 30 de marzo al 04 de abril 2021
Sol en Puerta 21. La mordedura tajante. El cazador/ La cazadora
“El necesario y justificado uso del poder para superar interferencias persistentes y deliberadas"
Diseño Humano. Lynda Bunnell y Ra Uru Hu
21ª Clave Genética. "Una vida noble"
Sombra: Control / Don: Autoridad / Sidhhi: Valor
Las Claves Genéticas. Richard Rudd