sábado, 20 de diciembre de 2014

salió a recibirle

Salió a recibirle. Una mirada bondadosa de una madre que enseñaba su hogar.

«Verá aunque trataron de arreglar las humedades siguen presentes. Ahora en invierno hace frio pero prefiero dejar las ventanas abiertas para que ventile»  

La casa un bajo interior de unos 60 metros cuadrados de una finca muy antigua, distribuía como podía habitaciones, algunas sin luz exterior, de una familia humilde migrante. La señora pagaba un alquiler a duras penas y sus dos muchachos, recién le comentaba resignada con lágrimas en los ojos había perdido a otro, cursaban estudios en el instituto público del barrio. Los dueños vivían fuera de la ciudad y la habían confiado, cosa extraña por lo que supondría para ella y su familia tener que buscarse otro hogar, para que alguien, les tasase la vivienda. Había recibido propaganda de una inmobiliaria local.

Se le encogió el corazón. Aunque en su trabajo toda casa tiene un precio, hay veces que la realidad se impone cuando se advierten incoherencias en los métodos,  y se intuye, aunque no sea del todo cierto, esa sensación de haber hecho algo mal.  Así es como se sentía en ese momento.

Trató de darla una solución. La orientó en el precio y la sugirió que antes de confiar en una agencia lo intentara según sus indicaciones. Para que hablarla de posibilidad de exclusivas y comisiones. La mujer le dio las gracias y se disculpó por no poder ofrecerle café. Un perrillo que correteaba, les seguía en la visita. Pedía atención, caricias y juego. Se despidieron. Se desearon unas felices fiestas y todo lo mejor para el próximo año.

A la salida sin muchas ganas de trabajar se volvió para su casa. A la entrada del metro se paró. Un guitarrista que se ganaba unas monedas, en agradecimiento a su atención le regaló una sonrisa. Interpretaba de forma magistral recuerdos de la Alhambra del maestro Francisco Tárrega.

Las lágrimas afloran de muchas maneras.

Unas veces salen por el dolor de ver sufrir a alguien cercano. Otras, por la emoción sincera de sentir el dolor ajeno como propio cuando adviertes tantas desigualdades, tantas distancias entre las personas No en pocas ocasiones se disfrazan de compasión por uno mismo, cosas del ego. Y otras, sintiendo una bella interpretación, admirando la sensibilidad en la mirada de un desconocido con  la capacidad de transformar un duro presente, en el recuerdo de unas vacaciones hace unos años, donde, privilegiado desde el Albaicín, nuestro protagonista contemplaba y disfrutaba a la caída de la tarde, con el mismo sonido de fondo, la majestuosidad de una obra imperecedera.

La vida, pensó mientras un arrugado clínex se acercaba a su rostro, no es más que un viaje de aprendizaje.




Música: Recuerdos de la Alhambra
Autor: Francisco Tárrega
Interprete: Ana Vidovic

sábado, 13 de diciembre de 2014

esencia

En jardinería se habla de sustrato con referencia a la tierra que introducimos en las macetas. Las plantas necesitan del sustrato como hábitat homogéneo para crecer adecuadamente.

Referido al subsuelo sería la capa debajo de la capa superficial del suelo. La esencia, lo que queda del sustrato, es la sustancia, como si fuese ese jugo que queda al exprimir, lo que ya no puedes descomponer más. A lo largo de la historia filósofos cómo Aristóteles o Kant se propusieron buscar los principios y las causas de las esencias. Lo llamaban la ουσία.

Los colisionadores se crearon para tratar de entender sobre la materia oscura y la existencia de posibles dimensiones del tiempo y el espacio. Necesitan energía para acelerar más, colisionar más, exprimir más. Aceleraciones del que quiere conocer de los sustratos, las infinitas capas que lo componen, el conocimiento último de las sustancias y la arrogancia, o locura de querer agarrar con las manos la esencia de lo incognoscible.

Curiosidad, conocimiento, arrogancia, sustratos, sustancias y esencias, dimensiones de tiempos y espacios inalcanzables.

"Toco, escribo, esculpo, pinto, actúo para mí y cuando lo siento y me siento bien sé que transmito" 

No dudo que cualquier artista no hiciese suyas estas palabras. Si hay un interés, lo que le importa, lo que actúa entre él y los demás es lo que le hace sentir. Se actúa  desde el corazón siendo para ti, que no desde la mente, entre. Desde donde habita el Ser, interior hábitat que conexiona con nuestra verdadera naturaleza  divina.

Si esto lo sientes transmites y si transmites para ti porque así lo sientes, llegas.

Los creadores autocríticos en su esfuerzo, en su mundo, siempre quieren más. Buscan la perfección y exprimen esta para encontrar y alcanzar espacios inalcanzables porque te muestran la existencia de tiempos sin necesidad de acelerar porque saben mostrarte  ese jugo que queda al crear desde dentro.

Y lo que te llega y te muestran, si sabes apreciarlo se llama esencia. Porque la esencia vinculada al alma es aquella que logra moverte, emocionarte y sentir...


jueves, 27 de noviembre de 2014

indicadores

Indicadores. El mundo actual va de indicadores.
¡Resultados queremos resultados!
La alarma del móvil suena. Me despierto. La temperatura de la casa ha alcanzado la premisa de consigna. La caldera se apaga. El testigo de gasolina se enciende. ¡Warning!. El jefe envía informe a los de arriba y a los de abajo, los directores analizan diagramas de barras, quesos, estadísticas, análisis de datos, hay que tomar decisiones, esto no va, o va. Las encuestas dicen esto sobre eso y eso sobre aquello. La era tecnocrática necesita datos, metadatos, potentes procesadores trabajan al compás de unos testigos que se encienden y se apagan en silencio, tablas de Excel, programas que analicen si haces las cosas, si las haces bien o si hay que hacerlas de otra manera. Sin indicadores los tecnócratas no saben nada, están perdidos, sin pruebas. No saben que decisión tomar. Con los indicadores creen saber algo, el empirismo determina resultados y tienen poder y lo malo es que tengan o no experiencia, se lo creen y toman decisiones.
En el campo un viejo pastor de ovejas comienza su rutina diaria a las seis de la mañana. Sale de su hogar, mira al cielo y otea el horizonte. Son ya muchos años de experiencia para acertar con el tiempo. Con sólo mirar el viento, el movimiento de las ramas de los árboles, la humedad, la migración de las aves,  la forma de unas nubes, el comportamiento de su rebaño, ve lo que se avecina y obra en consecuencia. Con su experiencia los indicadores le indican el camino a seguir. El pastor tiene poder.
El mundo actual necesitado de control, de controlar, está en manos de tecnócratas. Los tecnócratas tienen poca experiencia, pero mucho poder. Los pastores mucha experiencia, pero a estos no les pregunta nadie. A nadie le interesa que dicen sus indicadores. Los indicadores sin experiencia no valen gran cosa. El mundo actual el que se mueve por indicadores obvia el conocimiento de los más sabios y así nos va.

miércoles, 26 de noviembre de 2014

capacidad innata

Tenían la capacidad innata de percibir la belleza. Incluso en un medio hostil sabían encontrarla.

Su secreto se basaba en el desarrollo de un sexto sentido que les permitía comunicarse profunda, emocional y afectivamente con lo que observaban.

Los que les buscaban, querían encerrar sus dones entre los barrotes de su mundo porque los consideraban peligrosos. La hostilidad les había vuelto insensibles. 

Eran cazadores coleccionistas de especímenes en extinción.

Aunque conocían el lujo no querían percibir la belleza. Habían oído hablar de ella. Pero la tenían miedo. Por inimaginable que parezca no sabían muy bien en qué consistía.

Los seres que percibían la belleza eran sensibles, confiados, pero socialmente unos inadaptados. Raras avis observadas por aquellos buscadores de especímenes únicos, pero peligrosos para una sociedad hostil, enferma y desconfiada.

Por eso, se les localizaba, se les vigilaba y si manifestaban sus dones, basadas en la sinceridad, se les acosaba y se les apartaba del medio para encerrarlos, por si acaso contagiaban al resto.

domingo, 23 de noviembre de 2014

tiempos diferentes

Entendamos un tiempo diferente donde la cordura sea diferente. Tempus,  temporis, significa sien (cada una de las dos partes laterales comprendidas entre la frente, la oreja y la mejilla) y sien está, etimológicamente vinculada al juicio y discernimiento. Los catalanes hablan del "seny" con referencia a la cordura, como percepción ecuánime y de sentido común antes de enjuiciar. Como vemos lo temporal está asociado, en cierta manera, a esta parte de nuestra anatomía.

Pero... ¿Un tiempo diferente a qué?

Diferente a la cordura que conocíamos. Opuesto a locura, como estado mental estaría la prudencia y la sensatez. Pero no hablo de locura. Admitamos pues que iniciásemos un estado de cordura, prudente y sensato pero diferente a algo que conocíamos. Repito diferente no es opuesto. Hablo de diferente sensatez o prudencia,  en definitiva diferente cordura.

El Tiempo del no tiempo no es la interpretación por oposición que nos parece indicar. Una que nos llevaría a perder el juicio por no disponer de referencias espacio temporales admitidas en nuestra realidad conocida hasta ahora. Esa sería la interpretación vaga y subjetiva de personas ajenas a la percepción de un cambio de por si actualmente existente, enrocadas socialmente, encerradas en el orgullo de lo existente como justificación de una enajenación mental no reconocida participada por una mayoría alienada, con lo único que les han enseñado, implacables defensores de un sistema, su sistema en el que creen y necesitan creer.

Unos parámetros desaparecen y otros son latidos incipientes de la sien, que reflejan que uses la cabeza con una cordura, ese dedo atornillando que  Mary Shelley imaginó de forma literal en la sien de su creación, diferente, donde el juicio y el discernimiento te sean mostrados desde la ecuanimidad y percepción sensorial reajustados a una nueva realidad, misma realidad anterior pero diferente percepción de la misma.

Nuestra cordura pudiera ser cuestionada por más de uno que nos rodee, pero es acorde a una percepción mostrada, de muchas formas inimaginables e inadvertidas para  quien no quiere ver y que ratifican y confirman esa cordura diferente para estos tiempos diferentes.

Su interpretación todavía es de difícil comprensión (no pocas veces vemos sólo lo que queremos ver) pero estando  presente y siendo consciente de ello, aventura el cierre definitivo de una época y por descontado la apertura de algo no conocido.

Para ello se necesita coherencia entre percepción, pensamiento y acto. Y diría que, se manifiesta y siempre te recuerda, el objetivo de nuestra existencia, en tanto en cuenta el amor y el dolor por el sufrimiento ajeno, se sientan y te penetren y revuelvan tu conciencia.


jueves, 20 de noviembre de 2014

un mundo repetido

La luz del Sol tarda unos ocho minutos en venir. Cuando miras desde el presente simplemente observas el pasado. El futuro ya pasó. No existe manera física, de observarse a uno mismo, como no sea mirándote en un espejo donde se refleje tu propia imagen, y esta sólo reflejará en milésimas de segundo el pasado y la parte superficial y visible de ti.

Tratar de ver más allá hacia mi interior necesita de práctica y quietud. Este mundo, y mi sagrado libre albedrío, me lo permiten, pero yo, y mis responsabilidades (seguramente mal entendidas) en un mundo de competición y distracción en el que hay que pagar por todo, no me lo permiten. Al menos todo lo que yo quisiera.Todo se mueve y cada vez más rápido, y yo quiero pararme e  ir cada vez más despacio.

Observo el presente me detengo: Por la mañana en el metro las personas andan con cara cansada. Cada vez hay más gente que se gana como puede unas monedas interpretando canciones de vagón en vagón. En el exterior parado delante de un semáforo una señora con moño blandiendo al aire con una mano un bote con detergente, con otra un limpia parabrisas, se abalanza sin previo aviso y en un instante te limpia el cristal quieras o no, a la salida del super un emigrante extiende un vaso de plástico, ambos buscan lo mismo.

Duele.

El trabajo durante el día se hace duro. Como en casa de mis padres y así les veo y hago una visita. Una señora en la tele habla del ingreso en prisión de una tonadillera y del inminente fatal desenlace de una duquesa. Mi madre no le quita ojo a la tele. Por la tarde después de acabar la jornada, acompaño a mi hijo a entrenar. Compite los sábados. Le preparan. Volvemos y le ayudamos en sus estudios. Examen, deberes, memorización, metodologías oficiales para que en el día de mañana se gane la vida.

Por la noche enciendo la tele. Veo competición y limitación de tiempo en un programa concurso con una rueda con iniciales de letras, competición y prisas en un programa de cocina, competición y niños disfrazados de cantantes a imitar en un entretenimiento de música. Unos jóvenes encerrados en una casa haciendo el memo, competición en el deporte rey, anuncios de publicidad, trágicos telediarios, frio en Nueva York. Cóbrate Antonio, el anuncio de Navidad donde un abatido hombre se lamenta de no haber comprado el boleto que lleva a la felicidad. Lo más bonito es compartir. Mira en eso concuerdo con el capcioso y engañadizo anuncio.

Todo un mundo globalizado esperpéntico por repetido, donde se busca desde la competición y el dolor, emocionar. El espectador pasivo descansa de una jornada extraña, agotadora y repetida. Me voy a mi cuarto me niego a seguir viendo rutina. Pongo música, leo blogs alternativos, prensa oficial. Se ha muerto la duquesa, el ébola ha desaparecido de los medios. ¿Será cierto?, ¿Habrá ya cura?. Me entra sueño, antes de acostarme releo mis reflexiones de unos cuantos años escribiendo por la red.

"escritosenred" decido titularlos y en breve agruparlos, modificarlos (cuidado que escribo tonterías), quien sabe si algún día publicarlos.

Sólo existe el presente, y este es como una red que nos atrapa, un presente de un futuro que ya pasó en el que como ya conocemos lo sucedido, y no nos gusta, nos empecinamos en advertir a otros, si aún están a tiempo, para que despierten.

Si ya se, un poco triste todo.

sábado, 8 de noviembre de 2014

la hamartia

La Hamartia, la tragedia griega, que yerra el tiro. La equivocación desde el error que te lleva a hacer lo que no debes. Los héroes no merecen caer, y todos somos héroes, luego no merecemos estar caídos; Edipo mata a su padre, se casa con su madre por no saber su identidad. Dalila averigua que la fuerza de Sansón está en su pelo. Y se lo corta. Ahí se acabó su fuerza. La ambición de Macbeth le lleva a matar a Duncan y a todo inocente hijo de vecino que se le cruza. La vida misma, nuestra vida misma no deja de ser una tragedia contada por nosotros mismos,  idiotas que queremos hacer lo correcto pero no podemos, no sabemos y nos equivocamos. Nuestra identificación con los héroes de las tragedias, con las propias tragedias nos recuerdan nuestra propia condición humana.
Todos los errores son fruto del desconocimiento.
Nuestra existencia desde un punto de vista gnóstico no difiere mucho de la hamartia griega o de las religiones en tanto en cuenta que como caídos o atrapados en la materia por demiurgos, esos artesanos de la materia que denominaban los griegos, nos quieren perpetuar en su propia creación virtual y vernos prisioneros de su propio error. Otra tragedia más, como si nuestros carceleros demiúrgicos nos dijesen; hemos perdido las llaves, ya sabemos que es un error más, pero nos importa un bledo buscarlas.  Nos divertís mucho, erráis mucho, sois nuestro particular y preciado entretenimiento cósmico.
Como en el Conde de Montecristo quizás estemos a punto de apañárnosla para no se sabe muy bien cómo abrir la cárcel por la que el Ser sin escapar de la materia tome plena consciencia de su situación y mande a freír espárragos a estos funcionarios de prisiones. Una emancipación o caída libre necesaria para empezar a volar.
Veo un documental sobre el universo invisible:
Lo que a simple vista vemos tan sólo es una parte de una realidad mayor, necesitamos parar el tiempo revisar a cámara lenta para que se revele lo que nuestra percepción no acierta a ver.
Parar lo normal, tal vez una necesidad que explique lo que percibes y se encuentra al margen.
La cuestión no es si Dios existe, o los dioses  existen. Si estos han errado o no. Si somos capaces de entender este universo invisible a nuestra limitada percepción.
Y digo Dios y dioses y todos sabemos a quién y quienes me refiero. Llamadlo/os como queráis:
La cuestión principal es si se ocupa, o se ocupan, de nosotros. Si verdaderamente les necesitamos para volver a ser libres o somos esos héroes, semidioses para Sócrates procedentes del amor entre dioses y mortales, portadores sin saberlo y aun errando de la llave que nos abre la puerta de la eternidad.
Si somos capaz de perdonarnos como acto consciente por no saber lo que hacíamos ya llevamos mucho ganado.

miércoles, 5 de noviembre de 2014

oscila

Oscila, se balancea al viento, resuena, vuelve a sonar repetidamente, se cuelga desde un solo punto y después de encontrar un equilibrio se mueve alternativamente de un punto a otro. 

Primero a un lado, luego a otro, y vuelve, vuelve...

Se columpia hasta encontrar los límites  que le permiten a ese balanceo vibrar. 

Y vibra pacientemente, reverbera, tiembla y se agita.

¿Es una onda?, ¿Es una ola?, ¿Es una frecuencia?, ¿Es un sonido?

Sí, y también un recuerdo, una cuna de bebe, un columpio en su niñez, una hamaca de mayor, una mecedora en su vejez, un descanso. 

La calma del tiempo, un diapasón al compás, la que afloja los nervios, la que le hace estar bien. La que le duerme en serena placidez.

Quizás así se entienda porque yendo y viniendo, necesitamos mecer la vida, equilibrarla con constancia, paciencia, respirarla, balancearla y disfrutando, saborearla repetidamente.

Hazlo con una melodía, con una mirada serena, con la mente detenida, con la respiración pausada. 

Las olas de la vida van y vienen. 

Se necesita, porque calman, mecen y reconcilian, pero sobre todo porque acallan el ruido exterior y lo que es más importante, te reencuentra con tu Ser interior.


lunes, 3 de noviembre de 2014

truman

Somos personas, actores de nuestras vidas, o somos espectadores de vidas ajenas.
La palabra anglosajona  show tiene tres significados “teat” de donde deriva su utilización como espectáculo artístico en un cabaret o teatro, jaleo o farsa.
De hecho ante una situación que  lo que trata es de llamar la atención de la gente, es inevitable no definirla como un show. Cuando se estrenó la película el show de Truman (true man) hombre verdadero, farsa en la que Jim Carrey no era consciente de que la historia de su vida era retransmitida en directo, caricatura de una sociedad enganchada a los medios (en este caso la televisión), el retrato sociológico invitaba a la reflexión de si somos actores o espectadores de nuestras vidas.
Truman está completamente desinformado. No conoce el verdadero mundo real. Está engañado. No tiene información veraz para conocer la realidad que le rodea. Está sujeto a engaños y mentiras constantes (puesto que el mundo que le rodea es completamente falso).
Próximamente un web master advierte que el nueve de este mes, según sus averiguaciones numerológicas, comienza el show. ¿Experiencia o datos empíricos? En España el show ya ha calentado motores estamos asistiendo a un tráiler o avance, respirándose un clima político en el que asistimos atónitos como espectadores, caso tras caso, a la corrupción por parte de dirigentes políticos sin escrúpulos, que sólo entienden su función pública como instrumento para enriquecerse ilícitamente.
Como a Truman, actor de su propia vida, que intuía que le estaban engañando, cabe la posibilidad de que el show derrumbe de una vez por todas la farsa que nos convierte en espectadores desinformados de lo que nos han dicho hasta ahora, y hemos creído que es.
Pero si así fuese de nuevo el show definido otra vez como farsa, nos anuncia tiempos venideros en la que las cosas no serán lo que parecen. Como si un acto final, dure lo que dure, nos convierta de nuevo en espectadores de un teatro,  víctimas de lo que venga.
Como dice Grayling: "Si podemos influir en lo que ha de suceder entonces somos responsables de lo que sucederá. Considerar el futuro como abierto nos convierte en capitanes de nuestro destino. Pensar lo contrario que la profecía existe y por tanto el futuro está predeterminado no convierte en meras victimas del destino".
No somos actores engañados, ni espectadores pasivos de nuestro futuro.
El futuro todavía no existe pero es nuestro para construirlo.

lunes, 27 de octubre de 2014

reminiscencia

Buceo en internet sobre el concepto de la reminiscencia platónica. 

La “anamnesis” es la acción de recordar eventos y experiencias pasadas. Platón entendía que el  alma del ser humano, al conocer no genera nueva información, sino que “recuerda” algo que ya conocía del mundo de las ideas, una etapa previa a la vida física (material). El conocimiento en el hombre es innato; el alma del ser humano conoce ya la verdad antes de encarnarse en el cuerpo, y la tarea del hombre en la vida es ir recordando todas las cosas que su alma ya conocía, las cuales, como consecuencia del proceso de encarnación, habían sido olvidadas. De esta forma, no es posible para el hombre ampliar sus conocimientos, puesto que éstos se encuentran en él desde su nacimiento, sino tan sólo sacarlos a la luz, recordarlos, y esto es lo que nosotros llamamos "aprender"

Un aporte me invitó, acción consciente de mí Ser, a buscar el título de la canción y álbum que en el mismo momento que lo leía escuchaba de fondo:
”back to the north” traducido “hacia el norte” Una épica canción del álbum Reminiscence de los músicos italianos Danilo Rea y Martux M.

Pudiera ser una interpretación a lo sucedido, relacionando esta experiencia sincrónica, que mí Ser accionase un mandato interno, con referencia a una misión de existencia basada en la idea platónica de la reminiscencia. 

Seguramente como afirma Platón el conocimiento del hombre es innato y por las circunstancias que sean su tarea en la vida, cosa que desconocemos, sea recordar las cosas que el alma ya conocía y que hemos olvidado al reencarnarnos y que en última instancia, también comparto con Platón, hacen referencia única y exclusivamente a la idea de que, la única verdad sea la propia idea  del bien, con lo que conlleve del dar fin al ciclo de reencarnaciones.

«Y ocurre así que, siendo el alma inmortal, y habiendo nacido muchas veces y habiendo visto tanto lo de aquí como lo del Hades y todas las cosas, no hay nada que no tenga aprendido; con lo que no es de extrañar que también sobre la virtud y sobre las demás cosas sea capaz ella de recordar lo que desde luego ya antes sabía. Pues siendo, en efecto, la naturaleza entera homogénea, y habiéndolo aprendido todo el alma, nada impide que quien recuerda una sola cosa (y a esto llaman aprendizaje los hombres), descubra él mismo todas las demás, si es hombre valeroso y no se cansa de investigar. Porque el investigar y el aprender, por consiguiente, no son en absoluto otra cosa que reminiscencia»

Platón en su diálogo con Menón


Reminiscence
Rothko 
Danilo Rea & Martux_M

miércoles, 15 de octubre de 2014

confusión

Vivimos tiempos de caos en los que percibo un cierto grado de protección o coraza que hace que muchas personas no quieran enfrentarse a la realidad. Y no es una cuestión material o económica la que evalúa tu resistencia a aceptar esa realidad.


A diario los medios registran puntualmente las noticias que se suceden, donde las reacciones emocionales se presentan y conviven en paralelo con nuestra rutina. Tu grado de sensibilidad o estado “consciencial” te hace experimentar esa realidad, acorazado de ella, aceptada por lo que significa, o confundido en mayor o menor medida.


Cuando en la vida ocurren acontecimientos que se perciben revueltos lo más normal es que te veas sin capacidad de discernimiento y entres en una situación ya sea a nivel de pensamientos o mismamente de percepción a través de los sentidos, de estados o estado de confusión.


Si discernir es distinguir, confundir es mezclar.


La confusión se puede revertir cuando consigues separar esa amalgama o mezcla o, sin querer separar los diferentes acontecimientos que percibes como revueltos, al menos logras un entendimiento de porqué atraes esas experiencias, de porqué como dice Carrillo, atraemos con nuestro estado de consciencia esas vibraciones que nos impulsan en nuestro propio proceso evolutivo o “consciencial”. 


Me temo que la reactividad, por desgracia, se hace necesaria como choque consciente para despertar, penetrar o romper tu propia coraza.


Recuerdo esta frase de Anne Givaudan:


"Somos el lamento de una ola que, olvidándose que es todo el océano, choca contra los arrecifes de la incomprensión. Para concebir y engendrar la mayor pureza, la creación más luminosa, es necesario haber experimentado la confusión"


Los diamantes se forman durante miles de años bajo una enorme presión y a temperaturas muy elevadas. Ese proceso de caos y confusión deja en cada diamante unas marcas internas que determinan su grado de pureza.


La conclusión es clara y a unos les tocará antes que a otros, pero me temo que estamos aquí para experimentar la confusión y el caos. Sólo así podemos aprender a discernir y avanzar en nuestro estado “consciencial” para alcanzar ese grado de creación luminoso que todos llevamos dentro. 


De ti depende si quieres acorazarte de la realidad protegerte de esta, tarde o temprano, en esta u otras vidas te tocará experimentar la confusión, aceptarla por dolorosa que sea y extraer de ella su aprendizaje.


Mientras, independiente del grado de asombro o estado emocional que experimentes y aunque cueste trabajo aceptarlo, desde el discernimiento que distingue, desde la paz interior y desde la experiencia de amor, entenderás que, a pesar de todo (aunque no lo parezca) aunque la mezcla sea dura de aceptar, todo absolutamente todo está bien, ya que todos a pesar de ser olas que chocamos contra las rocas de la incomprensión formamos parte de la unicidad del mar.




domingo, 12 de octubre de 2014

...belleza, cadencia, control,...

...belleza, cadencia, control, consciencia, equilibrio, energía, espacio, eternidad, existencia, grandeza, inmortalidad, quietud, paz, percepción, placer, poesía, precisión, respiración, sensibilidad, sentimiento, serenidad, silencio, simplicidad, ternura, vacío...



Blame It On My Youth / Ulf Wakenius



Si pudiese separar cada palabra expresada en un instante infinitesimal que permitiese sentir al tiempo que escuchar, lograría expresar un sentir, mi sentir y transmitiros una emoción, mi emoción.

jueves, 9 de octubre de 2014

ébola

Vivía tranquilo occidente presenciando desde el palco del teatro, sin atender mucho, a la obra que se representaba en África. De hecho, los bostezos ante tanta miseria, guerra y hambruna, enfermedad y dolor impedían cualquier aplauso caluroso a esos actores tan reales y alejados de ellos. En esto que, a una enfermera altruista poco instruida en equipos de protección individual, por desgracia reactivamente, despertó sus inmunes hipócritas conciencias cuando por los motivos que sean se contagió de un peligroso virus fabricado no se sabe muy bien dónde. ¿O tal vez sí? 

Cual si de una mecha encendida la histeria, manejada desde los hábiles hilos del interés mediático, prendió en la psique del seguro mundo civilizado, ese de fascinación, dinero, consumo y progreso. Los controles en los aeropuertos, los protocolos ante lo desconocido, los pronósticos en boca de expertos científicos, torpes mandatarios e ingenua ciudadanía, el choteo en twitters y memes de ciudadanos agobiados por la pesada carga de no otear un futuro de posibilidades, agarrados al infame cotilleo del dolor humano de una de los suyos, porque los otros los de abajo los de Sierra Leona o Nigeria no son ni suyos ni reales, dibujaban un panorama de hedor insoportable. La puerta del virus en este mundo cada vez más globalizado, de par en par invitando al preestreno de la tragedia.

Nervios, crisis, desolación, pánico, miedo, si se veía venir, tarde o temprano sonaría el timbre de la platea del dolor del último acto. El ser humano, sigue en crisis sobre todo cuando la tragedia se acerca o te puede tocar al ladito de tu casa en tu tranquilo y seguro palco de vecindario o ciudad. El primer mundo torpe ajeno al dolor ajeno, el tercer mundo… para que hablar del tercer mundo tan lejos, tan aparentemente acotado en un escenario de miseria, vestidos con los trajes de futbol de sus héroes de occidente, enterrando a los suyos en zanjas.

Los números son cortos, y posiblemente ojalá así sea, nos olvidaremos pronto, para dar paso a otro estreno que nos entretenga.  En Sierra leona han fallecido seiscientas personas, y se han confirmado seis mil doscientos casos para una población de seis millones de personas. Y en occidente de un total de catorce casos sólo han fallecido tres. Pero la histeria a lo desconocido, el miedo a dejar esta existencia es tan real como posiblemente ese virus tan devastador y la constatación, nos guste o no, de que el ser humano para la tierra que habita es tan vírico como el mismo ébola que silenciosamente emborrona una mancha que se expande lenta pero inexorablemente sobre el impoluto mapa terrestre.

El miedo que se trasciende, y no se cuenta, es ese que nos hace pensar que la eugenesia vírica o la que pudiera resultar de guerras prefabricadas está en la mente de unos pocos desalmados como remedio sanador para un ciclo que se cierra, porque aceleradamente creciendo piensan que nos vamos a dar, perdonen la expresión, como vulgarmente se dice, una hostia. De momento observando lo que pasa, siguen fallando. Y lo más recomendable que se me ocurre es seguir en nuestro centro alejándonos de quienes desde el miedo ejercen un control sobre las emociones de una ciudadanía desconcertada sin saber a qué agarrarse, ante un futuro incierto.

domingo, 5 de octubre de 2014

bueno e ingenuo

En el principio en nuestra bendita inocencia somos ingenuos (Ingenuo significa nacido libre y no esclavo, que tiene en su interior un linaje libre) y posiblemente buenos o sin malicia. 

Dura poco. 

La perversión que supone despertar a la vida paga como peaje (en cuanto somos capaces de coger algo con nuestras manos) una autoafirmación del ego, aprendiendo a decir mío y dejando de ser técnicamente buenos cuando pretenden quitarnos lo que consideremos como nuestro.

Los “enemigos” siempre pretenden arrebatar nuestras preciadas pertenencias.

De mayor cuando procuras hacer el bien (el ejercicio de la bondad) te defenderás de no ser ingenuo, renegando de ese principio de libertad, porque entenderás que si no te haces respetar, te etiquetarán. 

Y la bondad se igualará a la tontuna y lo de quedarse atónito frente al contrario, (que es como un enemigo) es carnaza para esos desaprensivos interesados en lo tuyo.

Todo esto viene a cuento por reivindicar la ingenuidad, la libertad ese linaje libre con el que nacemos. Estamos necesitados de ingenuidad, así como de afabilidad, de compasión, de honradez, de virtuosismo, de rectitud, de justicia, de honestidad, todos ellos sinónimos de bondad. 

Claro está que para ello se hace necesario un ejercicio en vida de desapego. De decondicionamiento, de desaprender, lo que, sin ser consciente de ello, te hace esclavo.

"Aunque me tomes por ingenuo soy buena persona no me engañes. Mi ingenuidad forma parte de mi libertad que es tan tuya como mía"

El asombro (sacar a alguien de lo oscuro) el exponerlo a la luz que es el proceso de bienvenida a la vida es acompañado en primera instancia por la inocencia “no visible” y por la ingenuidad como leyes de pleno derecho adquiridas. 

Lo que viene después como ejercicio en vida no deja de ser un despropósito que te aleja a las primeras de cambio, de estos principios y que pocos logran entender.

No sobran los ingenuos, ya que así nacemos. Si acaso los ilusos que entienden su existencia, desde la esclavitud de sus posesiones (la ilusión de sus engaños), y el dominio sobre otros, a la bendita, inocente e ingenua libertad con la que nacemos verdadero propósito en vida.

Lo mío, si es que algo lo fue o lo es, es vuestro, es de todos. 

De veras.

lunes, 15 de septiembre de 2014

and i love her

Emoción, sensibilidad, y belleza.

Un dedo pulgar se dobla en una mano izquierda contorneándose para puntear una balada con una guitarra acústica. Abraza el mástil por arriba cosa insólita, y la sexta cuerda siente su presión. La mano derecha se desliza con suaves pinceladas en unos dedos que acarician cada acorde. Los ojos cerrados ven y sienten y la cabeza doblada acompaña a un cuerpo también doblado, contorneado como su mano izquierda, que dobla a la guitarra porque quiere estar lo más cerca posible de donde sale el sonido y no quiere perderse detalle.
La emoción, la sensibilidad, y la belleza son tres de las piezas claves que nos faltan de un puzzle incompleto ya de por sí, para cambiar la limitada visión de nuestra existencia que nos lleva a querer imponer con frustración nuestra verdad a los demás con lo que eso conlleva de impotencia y en otras facetas de la vida trágicas, de sufrimiento y dolor entre congéneres:
“Bright are the stars that shine, dark is the sky”
Luminosas son las estrellas que brillan, oscuro es el cielo.
Pat Metheny versiona la balada de los Beatles “And I Love Her”



sábado, 13 de septiembre de 2014

el espacio tiempo se puede doblar

El espacio tiempo se puede doblar. Demuestro esta afirmación.
Pensamiento, realidad, consciencia, percepción, interpretación, sincronicidad, números. Todo en un instante, microsegundos imperceptibles, como suspendidos en un instante congelados que cambian la realidad, o realidad que llevas a tu terreno acorde a tus pensamientos.
¡Oh sorpresa!
A partir de ahí interpretas. 
¿Soy yo?, ¿es algo o alguien ajeno a mí?, ¿es mi otro yo? 
¿Qué es?...
¡Vaya! ―no me había dado cuenta. ¿De qué? no nada, de esto, de aquello.
Asociación disparatada, coincidencias inverosímiles, esta es la interpretación ajena a ti desde el mundo real y racional. 
¿Casualidades? ―mejor me callo no me iban a creer. 
Pero íntimamente sientes que estás inmerso en un proceso acompañado.
¿Quién te acompaña?
¡Qué más da! 
Si lo buscas te aseguro que lo encuentras afirma uno que parece ser que sabe de qué va esto y te miran entonces raro siquiera si osas hablar de estos temas, porque te etiquetan de charlatán, de persona desequilibrada, de vivir inmerso en estados alterados de conciencia por procesos cognitivos absurdos. De vivir de espaldas a la realidad. Seguramente ha pasado por experiencias traumáticas en su infancia o recientemente. Es tan sensible. Le da por leer cosas raras. Siempre fue así, como ausente en su mundo, no se integra se le oye decir a uno. Otro que también parece ser que lo sabe todo. 
¡Hay tanta gente que lo sabe todo!
Pero tú sigues atento, observando, siguiendo el juego. Los números y las letras en determinados órdenes informan desde planos superiores. El título de una canción, una misma melodía, una noticia que te llama la atención, procesos paralelos a tu rutina diaria. Reuniones, discusiones en el trabajo y con los tuyos, estrés, noticias, la compra, llegar a fin de mes. 
¡Vaya! me han puesto una multa. Todo sigue una agenda inalterable.
Los ves dormidos, o eres tú el que estás dormido.
¿Qué interesará? ―¡Ah sí!, el fútbol, la política, el dinero, la religión,  el ocio, todo pura distracción, parece mentira que no me acordara, en que estaré pensando.
Todo tiene su parte difícil, estudiar, investigar, desechar, discernir, seguir. Buscas un hueco en el día de comunicación contigo mismo. Lo buscas en determinados momentos y de diversas formas. Buscas una conclusión que de sentido a esto: 
Observas a una pareja paseando de la mano y un poco más adelante, un anciano en un banco con las manos rugosas por el tiempo aferradas a un bastón que le sustenta, dirige su maltrecha mirada al frente. El aire mece suave las ramas de un árbol y las hojas en el suelo juguetean al vaivén del aire anunciando que pronto vendrá una nueva estación. El sonido de la naturaleza existe. Unas nubes caprichosas en sus formas. Un recuerdo, un sueño, una bandada de pájaros. Se empieza a poner el sol, y el aire limpio entra en tus pulmones tras una inspiración consciente...
¿O es un suspiro? 
El anciano se levanta y se va, las hojas siguen jugando, los pájaros se alejan. Todo se presenta como si se tratase de una metáfora de la vida misma. Mañana será otro día.
El tiempo lo doblas, o bien buscas reescribirlo en tu realidad. Cuando lo doblas, logras domar tu parte inconsciente a tu antojo. Lo ves ha vuelto a ocurrir. Miles de años de evolución para apenas haber evolucionado un poquito, y no entendiendo mucho, entender que hay algo más. 
¿Qué es?...
Te lo digo ahora, observa, entiende esto, olvida lo que has aprendido, todo, y cuando digo todo, es todo, va sólo y exclusivamente de amar, por tanto, de aprender a amar. Párate y observa respira, ama, comete la vida y esta será un regalo.
Será como esa bella y serena puesta de sol donde una pareja pasea su amor, donde un anciano al que no conoces, que ha vivido lo suyo, reflexiona, con la mente a lo mejor en blanco pero aparentemente sereno y en paz consigo mismo.
Y podrás materializar tu realidad al desear decirle de cerca, lo mismo que le dirías a las hojas que juegan, o a los pájaros que emigran, o al cielo que oscurece porque el Sol se va a descansar. 
Que los amas. Que amas la vida. Lo harás y doblando el espacio y el tiempo sincronizando tu mente con tu corazón, será entonces cuando un guiño cómplice a tu atención te será mostrado.
Se puede y ocurre, más de lo que crees...


martes, 9 de septiembre de 2014

huele bien

Una persona inocente es una persona que no huele mal: (in=no, y  ocencia derivada de ocena que significa mal olor fétido).  Los recién nacidos, los bebes, huelen bien, serán esos talcos para “el culete”  y las colonias al uso para niños. Recuerdo a mi madre cuando ejerció por primera vez de abuela, que decía que hasta las deposiciones tras la lactancia materna de su nieta olían bien. Aunque pueda parecer escatológico llevaba  razón y quien haya pasado por esta experiencia seguro que así me lo corroboraría.
Otra acepción que encuentro, últimamente me asombran las etimologías de las palabras, habla de in nocens. Y nocens viene de nocere, “hacer daño” por tanto inocente sería que no hace daño, que no hace el mal.
Si en el origen somos inocentes,  su opuesto el destino es también la otra cara de  la inocencia. Y si nuestra experiencia de vida tiene un origen y un destino, el camino será no perder de vista en ningún momento, que es estar atentos,  la inocencia. Porque una persona inocente es aquella que no concibe ni siente el mal y no se siente mal,  que está en paz, libre de culpa, y encima, escuchen y luego perciban y sientan,  a ver si aprendemos algo:
¡Huele bien!.

miércoles, 27 de agosto de 2014

evolutio

Muchos de los acontecimientos que observamos y ocurren parecieran obedecer a un diseño preestablecido encaminado a provocar una determinada reacción y sería bueno recordar que, físicamente hablando y haciendo un símil a nuestro comportamiento, cada acción (tercera ley del movimiento de Newton) produce una reacción igual y opuesta que quien sabe si es, lo que las religiones dhármicas han denominado en sucesivas rencarnaciones como karma. Eso de dar vueltas una y otra vez para ver si aprendemos algo.

A lo que percibimos y nos hace actuar o reaccionar se le llama estímulo. Y aunque los estímulos (aguijones) puedan ser positivos o negativos, sería prudente ignorar aquellos que buscan una reacción emocional ya sean éstos a niveles colectivos o que busquen espolearnos en nuestra individualidad hacia acciones, aun deseadas poco claras e interesadas.

Dado que lo importante no es lo que sucede sino lo que hacemos con lo que nos sucede, deberíamos distinguir cuánto de lo que nos sucede es propio y cuanto es un producto elaborado por otros, para provocarnos esas reacciones emocionales que siendo previsibles son fácilmente canalizables con finalidades de sometimiento  y control.

Por tanto sugiero que el que quiera hacer que haga, pero por propio convencimiento personal sometido a su propio juicio. Lo difícil es entender si nuestra espontaneidad, aquello que crece sin aparente cuidado, es propio o dirigido a un fin.

Los jarros de agua fría despiertan pero también paran en seco, paradojas de la vida, las ilusiones provocando tristeza y desmoralización con lo que conlleva de decepción, tensión y fracaso.

Será que todo ocurre porque queramos o no evolucionamos (evolutio) que por cierto significa, dar vueltas afuera. Y de lo que se trata es de conocernos nosotros mejor a nosotros mismos que el sistema. A lo mejor incluso, si lo logramos, dejaremos de dar vueltas una y otra vez y empezaremos la verdadera revolución.

«Tenemos el poder tecnológico, las habilidades de ingeniería para salvar nuestro planeta, para curar enfermedades, para alimentar a los hambrientos, para poner fin a la guerra, pero nos falta la visión intelectual, la capacidad de cambiar nuestras mentes. Tenemos que desacondicionarnos a nosotros mismos de 10.000 años de mala conducta. Y, no es fácil»
Mckenna

«En el transcurso de los últimos 50 años, los avances acelerados de la ciencia han generado una creciente brecha entre los conocimientos del público y aquellos poseídas y utilizados por las elites dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el “sistema” ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al individuo común de lo que él se conoce a sí mismo. Esto significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un control mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí mismos» 
Noam Chomsky

sábado, 23 de agosto de 2014

change for detachment

Utopía. Según Tomás Moro lugar que no existe.
El reto "CHANGE FOR DETACHMENT" se extiende a todo el mundo.
El desafío, que consiste en darle la vuelta al desapego y tomar conciencia de lo manipulados que estamos y las estupideces que hacemos, o donar una cantidad de euros a la lucha por la cura de la Estupidez Generalizada Mundial (EGM), comenzó entre los poseedores de EGO, prácticamente el 99% de la humanidad, y se ha expandido a todo el planeta, hasta colapsar las redes sociales.
Instagram, Twitter, Facebook y Youtube se han visto desbordados por uno de los fenómenos virales del momento. Cantantes, deportistas, actores y periodistas se han unido al reto de la toma de conciencia, que consiste en que todo el mundo sepa que colaboras por esta buena causa dejándote ver en las redes y la tele, confesar las estupideces que haces y, después, retar a tres o cuatro personas más para que lo lleven a cabo en menos de 24 horas.
El desafío fue creado por la asociación de sabios TSI (todos somos idiotas) con el fin de recaudar fondos para esta desconocida enfermedad de la ciudadanía que se origina cuando vas por la vida sin enterarte de nada, lo que provoca manipulaciones atroces entre tus  congéneres. La afección EGM empeora cuando las personas se dejan manipular siendo conscientes de ello, pero por desidia, que lo arreglen otros, miran para otro lado.
El desafío comenzó hace unas semanas y fue iniciado por un aficionado al fútbol quien tomó conciencia de esta enfermedad. Recientemente, le siguieron unos descerebrados que haciendo turismo se pasean borrachos desnudos por los comercios, y varios políticos de potencias mundiales que pasan el tiempo viendo cómo pueden invadir otras naciones. El reto que comenzó en España, se lanzó para todas las personas que quisieran concienciar al mundo de esta enfermedad y, gracias a las redes sociales, se ha expandido por todo el planeta.
El fenómeno se ha disparado y aunque no se sabe la cantidad hasta ahora recaudada, (se hablan de miles de millones), al menos las “celebrities” del mundo comenzaron a tomar conciencia y unirse a esta campaña. "Ahora que ellos lo saben, que somos todos estúpidos, es más fácil que nos curemos del EGM (Estupidez Generalizada Mundial)", ha comentado el célebre cantante Brasen Juicer.

sábado, 16 de agosto de 2014

espontáneo

Parece ser que lo espontáneo se produce por propio impulso, sin cultivo o sin cuidados. Aparentemente sin causa. Etimológicamente proviene del latín “espontáneus” del adverbio latino “spont” (voluntariamente, por sí sólo, sin ser obligado)

Pero una combustión espontánea por poner un ejemplo empieza por un arranque de un calor interno sin la necesidad de aplicar un fuego externo. Son las condiciones que se dan las que permiten que termine produciéndose la combustión. Las preguntas son:

¿Puede ser lo espontáneo controlado sin que nos demos cuenta?. La organización del sistema o de un sistema requiere ¿Nuevos modelos de estos? o ¿Nuevos controles de estos?

No será más bien que el verdadero cambio es interior indiferentemente del momento que te toque vivir. No será más bien que el sistema te quiere distraído ya sea con estos o con aquellos. No será más bien que nos falta información, estudio, discernimiento, reflexión. 

No será que se vive demasiado en la mentira y en el engaño. No será que nos falta flexibilidad para admitir nuevos paradigmas y nos sobra soberbia para pensar que todo está inventado. No será que en el fondo todo es una gran conspiración.

O no será en el fondo que lo sepamos o no nos toca evolucionar porque es lo que toca si o si y eso a algunos no le gusta.

No creo en lo espontáneo como no sea que por las circunstancias que se den, hayas vivido o te toque porque seas así, así se manifiesten y todo eso no es más que apariencia porque todo, incluso la espontaneidad, es causal y no casual.

El despertar social requiere de una fisión, de una combustión espontánea y esta será nos guste o no, dentro del sistema o fuera, que acabe con este modelo, con esta humanidad o que de paso a esta misma con todos u otros, orquestada por nosotros mismos desde el momento que demos portazos a todos los demiurgos que creamos desde nuestro espacio mental y que tan hábilmente nos han utilizado, con la complicidad y beneplácito de élites serviles que desde las emociones, se alimentan de nuestros temores y miedos más profundos.


viernes, 15 de agosto de 2014

sandokán

Hay decepciones que no se olvidan nunca. Kabir Bedi, allá por el año 76, contaba un servidor entonces con 12 años, interpretó para una serie de televisión a Sandokán. La música de la serie terminó por destrozar la imagen mental formada que uno se había hecho del tigre de Mompracen, Yañez y el indio Tremal Naik, los protagonistas ideados por el escritor italiano Emilio Salgari.
Cuatro o cinco libros llegaron a mis manos de la mano de mi padre y me introdujeron en el apasionante universo de las novelas de aventuras.
El siguiente paso fue devorar muchas joyas literarias; Verne, Twain, Stevenson, Scott, Cooper, May, etc. Lo hice a través de los comics. La editorial Bruguera publicó un total de 130 títulos que cada domingo que salían comprábamos por 20 pesetas. La emoción de cada ejemplar en mis manos la recuerdo como un maravilloso subidón de adrenalina. 300 ilustraciones a todo color eclipsaban, junto con la incipiente y distractora tele, toda posibilidad de leerlas en su publicación original, lo cual supongo me hubiese inoculado el veneno de escribir y dedicarme de lleno a la literatura. Aunque económicamente no pudiéramos comprarlas, las bibliotecas existían. Pero lo visual tiene un poder, falso poder, más fuerte que la capacidad de enriquecerte, transportar e imaginar que posee la lectura escrita. Esto lo aprendí con el tiempo y seguramente tampoco mostré mucho interés por ello.
Unos cuantos años después a finales de los ochenta, hubo una eclosión del mundo editorial que se lanzó a publicar comics. Los compraba todos: Cimoc, Metal Hurlant, Vértigo, Totem, 1984, Comix Internacional, Rambla, Madriz. Mi aislamiento y desbordante fantasía crecieron exponencialmente y en paralelo, a mis estudios universitarios.
Me reconozco distraído en un universo paralelo creado por la lectura, donde la condición humana, las historias creadas por historietistas como Carlos Giménez o el tándem Jodorowsky/Moebius, te llevaban a conocer desde las duras condiciones que se soportaron en la España de la guerra civil, a las fabulosas historias de ficción de John Difool a la busca del Incal.
Entre medias parece ser, como hoy, que existieron guerras entre países, crisis económicas, desigualdades, escándalos financieros, avances científicos, grandes películas, victorias de fútbol, vacaciones en agosto, cumpleaños, suspensos, alegrías, miedos y distracción, mucha distracción.
Un buen día me soltaron en el mundo real, para ganarme el sustento y poder criar, cuidar y alimentar a los míos. En este mundo real me rodeé de gente diferente. Gente que entendía de cumplir objetivos en la empresa, de trabajar para ganar dinero, que sabía cómo utilizarte para sus fines. Gente muy bien adaptada al medio. La bofetada fue mayúscula. Me agarré a los lados de un barco en plena tormenta.
Pasé a la introspección interior cuando la crisis personal se apoderó de todo. Internet eclosionó y la posibilidad de acercarte a otros planos y a otros mundos fue ya imparable.  La posibilidad de introducirte en la madriguera de tu mundo interior desde el trabajo silencioso, desde la música a tu alcance, no tuvo precio, ni remuneración, ni ganas, salvo de compartirlo con todos.  Un universo exterior que nunca me interesó porque me refugié en mi mundo interior y que, cada vez me interesó más porque cada vez que lo conocía más, entendía, porque nunca, desde mi inconsciente, quise hacerle caso.
Hoy 15 de agosto, con media España, en fiestas, el camino continúa. Ahora en vacaciones, toca reposar y repasar lo leído. El universo es mental, un primer principio a entender. Y entender, lo dije más arriba, es tener algo en la mente. Mi mente quiere porque busca y descubre, porqué encuentra y sigue, porque entiende, aunque recién iniciase su sendero y le quede mucho por recorrer y aprender en esta vida y de esta vida.
Rememoro esto dé a continuación que escribí hace ya unos años:
“Encontré el momento, me desmarqué de las líneas marcadas por otros, encontré el mío. Creé los espacios, los hice míos, acaricié lo invisible, lo hice mío, giré y roté sobre mí mismo, me paré, paré de nuevo, escuché atentamente, vi atentamente, percibí atentamente, lo hice mío. Respiré, respiré de nuevo más profundamente, de nuevo miré, miré atentamente, se mostró, cerré los ojos, fui cuidadoso, hice mío esos momentos, los hice eternos, los hice vuestros, os los regalé, sonriendo internamente, manifestándolo externamente, dejándoos ver, dejándome ver, dejándoos querer, y en esos instantes…. Traspasé la línea, supe que la armonía se equilibra sola, respira sola, fundé sola, sentí lo que es la vida, que es lo que tiene vida, que es TODO, porqué TODO ES y TODO lo ES, por qué nunca dejó de SER. Y lo hice mío y fue vuestro y fue de TODOS…”
El TODO es ESPIRITU que en sí mismo es INCOGNOSCIBLE y ENTENDIBLE pero que puede ser concebido como una mente INFINITA, UNIVERSAL e INDEFINIBLE.
Un maestro dijo: «El que capta la verdad de la naturaleza mental del universo está bien avanzado en el sendero hacia la maestría» y añado con humildad y convicción que nunca es tarde y que siempre se puede encontrar ese momento en la vida.
Mientras seguiremos distraídos. Yo así estuve mucho tiempo.

sábado, 9 de agosto de 2014

un día entendí

Hubo un día que tomé conciencia de mí mismo.

Hubo un día donde deje de lamentar mi mala suerte. Que dejé de quejarme.

Hubo un día donde deje de culpabilizarme y culpabilizar a los demás. 

Hubo un día donde use mi juicio y deje de juzgar. 

Hubo un día donde puse freno a mis pensamientos negativos. 

Hubo un día en el que al levantarme di gracias por un nuevo día. 

Hubo un día donde tímidamente dejé paso a lo inexplicable. 

Hubo un día donde entendí, lo insignificante e inmensamente grande que somos. Lo poco que sabemos, lo mucho que llevamos dentro.

Hubo un día donde decidí investigar por mí mismo, discernir por mí mismo, dudar por mí mismo, equivocarme por mí mismo, reconocerlo por mí mismo.

Hubo un día que entendí, que los números son símbolos que asignan, toman y distribuyen, que al percibirlos desde nuestra parte consciente nos informan, porqué es una de las formas de comunicación de los planos superiores. 

Hubo un día que asocié su presencia a mis pensamientos desde el inconsciente para establecer planos de comunicación. 

Hubo un día que entendí, que la música es la musa que protege las artes y al percibirla en silencio desde nuestra parte consciente nos informa, porqué también es una de las formas de comunicación, de dar noticias, desde de los planos superiores.

Hubo un día que entendí, que la persona que sabe, ve, lo que otros no ven y escucha, lo que otros no oyen.

Hubo un día que entendí, que la magia no es engaño, porque la magia es la cualidad de lo sobre natural, que entendí, que querer es buscar, que es mejor encontrar que es fluir, que buscar.

Hubo un día que comprendí, que comprender es entender, capturar eso que sucede y se dice.

Hubo un día que entendí, que entender es tan sólo tener algo en la mente.

Hubo un día, y ese día existe para todos, donde entendí lo que significa dar, y a partir de ese día entendí por qué este mundo está como está.

Y hubo un día (hoy) que entendí por qué amar proviene de madre, y aun sin saber,... ya no hubo más que entender,... que lo único que hay que hacer,... es AMAR…


miércoles, 23 de julio de 2014

Amor incondicional

“La mejor manera para resolver cualquier problema en el mundo humano es que todas las partes se sienten y hablen”
Dalai Lama


Decía el Dalai Lama que amar a tu amigo no es ningún problema. Lo difícil, es amar al enemigo.

Aquí en esta existencia de lo que se trata es de elevar tu estado vibracional.

Ama por lo que eres no por lo que te interese. Ama sin ego porque es entonces cuando verdaderamente amas, cuando escapas de la limitación de ese ego que quiere atrapar tu espíritu, tu ser y tus niveles de vibración. 

Elévate, recuerda que la máxima manifestación de la inteligencia es la espiritual la que eleva tu vibración, la que vibra con la palabra mayúscula Amor. 

Requiere esfuerzo trascender los niveles del ego para invertir un proceso difícil que en orden te debe llevar de la alegría, al Amor, a la paz y a la iluminación que no es más que en definitiva algo que los grandes maestros llamaron Amor incondicional y a la que muy pocos, contados con los dedos de una mano, han llegado.

De ahí la situación que esta humanidad padece y no arregla, porque ni sabe, ni entiende, ni quiere, ni se esfuerza, ni comprende, ni le interesa, ni le importa.



sábado, 12 de julio de 2014

ad infinitum

Podéis seguir hablando “ad-infinitum” de lo que queráis.

Sólo desde las emociones sentidas podréis traspasar el velo que aun nubla vuestras miradas. Esas que no ven lo que de continuo se te muestra. 

Ahí arriba, o a tu lado cerquita, se te acompaña, y aun sintiéndolo, y viéndolo, y mostrándose, si quiera atisbáis y llegáis llegamos― a entender, a comprender y asimilar de qué va todo esto. 

Estamos ciegos.

Sólo intuimos con que impecabilidad en nuestros pensamientos hemos de comportarnos. Razón máxima que vale, cuando logramos reequilibrar nuestras emociones para comportarnos justamente con nuestros semejantes. 

Ya sabéis como se llama eso.

Hasta qué punto es sincero, reflexiona por favor, unas gracias, o un perdona, lo entendí mal, un lo siento, te arrollé, no te deje espacio para respirar, me equivoqué, tú también sufres y ríes y amas como yo, no más que yo, ni que tú, ni que él. Por favor respira, respira de nuevo, reflexiona, párate:

¿Lo escuchas? ¿Lo ves? ¿Lo sientes? ¿Lo entiendes?

Podéis seguir hablando indefinidamente, de todo, hasta que se te muestre. Aunque sea con la tenue luz de la luna en una fría noche de un invierno cualquiera y ya nos acompañe de por siempre y para siempre en nuestras vidas.

¿Qué más querríais  comprender si ya no estaríais sólos?



sábado, 5 de julio de 2014

¿somos como nos ven?

Somos como nos ven, que no como nos vemos, que es quienes somos. La cultura, ese conjunto de saberes, creencias y pautas de conducta de un determinado grupo social, no lo podemos cambiar en tanto en cuanto que es lo que es, y es lo que somos, que es como nos vemos y como nos ven. 
Ya ven todo un galimatías.
Todo lo demás son etiquetas, y tópicos intencionados, por esa manía de reducir a la mínima expresión la complejidad de nuestros comportamientos, que en lo referente a la historia, nos han acompañado y acompañan, para bien en los momentos gloriosos de esplendor  y para mal en esos momentos, que los ha habido, no tan buenos de decadencia. 
Creo recordar que hace unos pocos años éramos admiración del mundo entero, ejemplo de crecimiento y modernidad y de fútbol de tiqui y taca. Y ahora pues ya ven ni el fútbol,  ni en na de na.
La vida se manifiesta siempre como una sinuosa e infinita onda de buenos y no tan buenos momentos. 
Por cierto los españoles vivimos en “funlandia”  la tierra de la diversión colindando con los brasileños y los italianos según un mapa interactivo de tópicos que se ha inventado un fulano.

viernes, 4 de julio de 2014

mi experencia

Desde mi propia experiencia pongo el foco en la espiritualidad, por eso miro y escucho lo que otros no ven ni oyen.

Mi creencia mi camino hacia la sabiduría, como camino de auto-conocimiento representa un dejar de buscar “fuera de mi”, un dejar de atraparme por el oropel, aparente y fugaz de lo material y adentrarme al interior para conocer y encontrar todo aquello que haya en él. 

Trato de encontrar la verdadera esencia y despierto a este juego kármico sin olvidarme de mis responsabilidades. Busco, un equilibrio, entre lo profundo y lo superfluo, esa ardua y dura tarea que nos imponen las reglas del juego en esta experiencia terrenal.

Desde esta creencia (interior) miro, escucho, rozo, en al ámbito de mi experiencia, lo que otros no ven, oyen o cogen, porque creo en la experiencia de los sentidos.

Y me como la vida amando, razón de mi existencia, respirando, que no me quiero perder detalle, que antes que ella me devore espirando, yo ya la habré mirado, y tocado, y degustado y sentido, cual éter imaginado...